La tristeza constituye una emoción que es inherente a la condición de las personas. Sin embargo, cuando se transforma en un sentimiento prolongado y severo, se transforma en depresión…
¿Qué es la depresión?
Hablamos de la depresión como un trastorno emocional que causa un constante sentimiento de tristeza y pérdida de interés por realizar actividades.
También es conocida como trastorno depresivo mayor o depresión clínica, y es la que afecta directamente a los sentimientos, pensamientos, y comportamiento de una persona.
Estos a su vez, pueden ocasionar una serie de problemas físicos y emocionales, que en algunos casos, generan sentimientos de no seguir viviendo…
No solo es el sentimiento de una profunda tristeza pasajera, la depresión es una debilidad de la que una persona no puede recuperarse con rapidez.
¿Cuáles son los factores de riesgo de esta enfermedad?
No es fácil encontrar una causa frecuente que justifique el aumento de la posibilidad de padecer depresión.
Sin embargo, existen factores de riesgo que están presentes en la vida cotidiana de las personas que podrían dar indicios sobre el comienzo de depresión en personas…
Algunas de estas causas son:
- Situaciones personales: suspensión de actividades, pérdida familiar, estrés continuo, consumo de drogas y alcohol, cualquier variación que desestabilice el equilibrio psicológico.
- Enfermedades previas: cáncer, diabetes, párkinson, migrañas, afecciones cardiacas, entre otras.
- Genes y factores familiares: Si existen familiares cercanos con depresión como la presencia de problemas de salud derivados de la síntesis de serotonina (neurotransmisor que regula el estado anímico).

¿Qué síntomas indican depresión?
Para muchas personas que padecen de depresión, los síntomas suelen ser lo suficientemente graves para causarles problemas en su rutina.
Si bien la depresión puede producirse una sola vez en nuestras vidas, existen personas que cuentan con diferentes episodios de depresión…
Durante estos episodios, las personas suelen producir ciertos síntomas como:
- Sentimientos de tristeza, ganas de llorar, vacío o desesperanza.
- Arrebatos, ira o frustración, incluyendo situaciones de poca importancia.
- Pérdida del interés por realizar la mayoría de las actividades que son cotidianas.
- Alteraciones del sueño (insomnio o sueño prolongado).
- Cansancio y falta de energía.
- Falta de apetito y adelgazamiento / ganas de comer en exceso y aumento de peso.
- Ansiedad e inquietud.
- Lentitud para razonar, dificultad para pensar y concentrarse.
- Pensamientos frecuentes sobre la muerte, sentimientos de inutilidad o culpa.
¿Qué tipos de depresión existen?
Los tipos de depresión más comunes son:
- Episodio depresivo: Puede empezar rápidamente en algunos días o lentamente en semanas, pero suele tener una duración de meses.
Algunos de los síntomas depresivos deben estar presentes más de dos semanas para poder hablar de un episodio depresivo.
La mayoría de las personas que sufren de episodios depresivos sufren más de una vez en su vida de depresión.
- Trastorno depresivo recurrente: Cuando existe una recurrencia de un episodio depresivo. Es decir, el paciente sufre de depresión más de una vez.
- Distimia: Es una sintomatología depresiva menos severa que el episodio depresivo, pero inicia en la etapa adolescente de una persona y puede durar años.
En algunos casos el paciente es diagnosticado con doble depresión por sufrir de episodios depresivos y distimia a la vez.
- Depresión bipolar (trastorno maníaco-depresivo): Es uno de los trastornos más severos.
Pacientes sufren de episodios depresivos y maníacos. Los cambios de ánimo pueden ocurrir muy rápido después de un estado de ánimo normal.
Las fases maníacas se caracterizan por un estado de ánimo excesivamente elevado, complementado con hiperactividad, inquietud, irritabilidad y disminución del sueño.
La manía afecta directamente al pensamiento, juicio y comportamiento social de las personas.
- Depresión psicótica: Se caracteriza por ideas o pensamientos falsos (delirios), y a veces alucinaciones. Suelen concentrarse en el sentimiento de culpa desproporcionada.
Las personas con este trastorno suelen ser derivadas a una unidad psiquiátrica debido al alto riesgo de suicidio.
- Trastorno afectivo emocional (SAD): Las personas suelen sufrir durante una o dos estaciones específicas del año, y normalmente cuando acaba la estación vuelven a su estado anímico y funcionamiento normal.

¿Existe algún tratamiento?
Los criterios médicos mencionan que los síntomas deben permanecer al menos durante 15 días continuos para poder acudir a un especialista.
Es importante contar con ayuda de un profesional cuando la persona ve afectada su capacidad vital y el rendimiento habitual.
Los tratamientos a tomar dependen del origen y gravedad de la depresión. Es por ello que es importante determinar la causa y actuar directamente sobre ella…
Los tratamientos deben estar prescritos por un médico, suelen ser integrales y combinan todas las acciones que puedan mejorar al paciente:
Tratamiento psicológico
Las terapias más utilizadas son:
- Psicoterapia: Intenta cambiar actitudes y comportamientos anormales.
- Terapia Cognitiva: Ayuda a corregir conductas y pensamientos negativos.
- Activación Conductual: El propio paciente aprende a dominar su vida y entorno.
Tratamiento farmacológico
Con el propósito de mejorar los síntomas de la depresión y que el paciente lleve una vida normal, el médico evaluará el medicamento que sea más adecuado para tratarlo…
Los efectos positivos empiezan a notarse luego de dos semanas de haber empezado a tomarlos.
Tratamiento físico
Realizar ejercicios tiene un efecto terapéutico, ya que produce señales que afectan a todos los órganos de manera positiva. El deporte mejora el estado de ánimo y los síntomas de depresión.
¿Cómo ayudar a quienes lo padecen?
La importancia de una persona que tiene depresión, cuente con familiares y amigos cercanos es de extrema importancia.
No obstante, hay que tomar en consideración que ayudar a alguien con depresión suele ser algo muy duro. Si estás en esta situación, lo mejor es hacer:
Aprender sobre la depresión, tratamientos y lo que se puede llegar a realizar (consulta a un médico de ser necesario).
Ayuda a mantener sus compromisos adquiridos para mejorar. Es importante mantener el tratamiento acordado por un médico o psicólogo.
Sé un ejemplo de vida sana para él/ella. Realiza ejercicio físico, aliméntate sano y comparte tu buen ánimo para cambiar su perspectiva y que tenga mejor predisposición.
Toma en serio sus sentimientos y muestra disponibilidad para poder hablar, mantén una conversación y menciona lo valioso que es para ti, nunca lo menosprecies o lo culpes.
Tómate tiempo para ti si estás ayudando a alguien con depresión, tu descanso y tu ánimo también es importante.